Se denomina piel de naranja a un defecto en la superficie de los esmaltes, donde la superficie se caracteriza por presentar pequeños poros. Es un efecto común en los esmaltes a la sal o soda, aunque en este caso no se considera un defecto.
Se denomina piel de naranja a un defecto en la superficie de los esmaltes, donde la superficie se caracteriza por presentar pequeños poros. Es un efecto común en los esmaltes a la sal o soda, aunque en este caso no se considera un defecto.