Los flujos de arcilla son un tipo de corrimiento, provocados por la inestabilidad de un talud. Se producen en zonas muy lluviosas afectando a zonas muy grandes. Los terrenos arcillosos, al entrar en contacto con el agua, se comportan como si alcanzasen el límite líquido, e inician movimientos que resultan ser más lentos que los deslizamientos. Los flujos de arcilla se dan en pequeñas pendientes, pero en gran cantidad.
Los flujos de arcilla son un tipo de corrimiento, provocados por la inestabilidad de un talud. Se producen en zonas muy lluviosas afectando a zonas muy grandes. Los terrenos arcillosos, al entrar en contacto con el agua, se comportan como si alcanzasen el límite líquido, e inician movimientos que resultan ser más lentos que los deslizamientos. Los flujos de arcilla se dan en pequeñas pendientes, pero en gran cantidad.