Voy a usar a esa abominación. El legado final de Albert.
He sobrevivido... Mi salvación no ha sido la muerte. Es culpa mía.
Cuando apreté el gatillo... en ese instante... la sola idea de desvanecerme de este mundo... ¡Yo! Imposible. Sentí miedo.
Que ironía. El virus dentro de mi... Pudriendo mi cuerpo hasta la muerte y a su vez salvándome de ella.
Me he convertido en un monstruo. No puedo verme en el espejo. No soy yo. Esta criatura no soy...
Pero pronto despertaré con mi otro yo. El huésped al que me he transferido.
No lo permitiré. Ni hablar. Ella es el monstruo. Y aun así me mira y se ríe de mí, de lo horrible que soy.
¿Por qué me he convertido en esta abominación?
Soy yo. Pero no lo soy. He despertado como yo misma. Pero entonces ella también despertará como si fuera yo. Ambas somos auténticas.
¡No! Solo puede haber una. ¡Y esa soy yo! Ella jamás será yo. Es falsa. Es una farsante. Y por eso no puedo permitir que exista.
Debe ser eliminada.
Yo soy yo. La verdadera.
Sentirás el abrazo helado de la muerte... Natalia...
Y entonces, cuando muera tomaré su cuerpo. Seré la verdadera.
Natalia... debes morir.