Cuando vi esta Iglesia me dió alegría ver las piezas de cerámica fabricadas en la alfarería de mi abuelo, al menos quedaran en el recuerdo, ya que se cerró definitivamente este año, entre la crisis y el no saber valorar la artesanía, pudieron con setenta años de antigüedad. Un rótulo que había en la entrada decía así
: OFICIO NOBLE Y BIZARRO
: ENTRE TODOS EL PRIMERO
: PUES EN LA INDUSTRIA DEL BARRO
: DIOS FUÉ EL PRIMER ALFARERO
: Y EL HOMBRE EL PRIMER CACHARRO
Fuentes del área de Cultura han señalado la posibilidad de ofrecer un taller dedicado a esta actividad artesana, con dos condiciones, en primer lugar que no podría ser estable sino “con una periodicidad” y en segundo lugar que estaría abierto a personas de todas las edades. El área de Cultura estudiaría el presupuesto que presentaran los ceramistas.