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| - Westfall (lore) o Páramos de Poniente (WoW) linda con el Reino de Stormwind y está poblado por humanos que no están bajo el completo control de la Alianza. Los derechos sobre esta región fueron robados por los propios humanos de la Alianza en sus narices. Estas ricas tierras permanecieron en barbecho desde que finalizó la Segunda Guerra, pero ahora son explotadas por la Hermandad Defias. Stormwind reclama la tierra como propia, pero ha empleado poco tiempo en preocuparse por ella y no ha asignado suficientes fondos en su recuperación. Un puñado de agricultores todavía tratan de mantener sus tierras, y algunos incluso deben pagar un diezmo a Stormwind, pero la mayoría sólo consiguen lo suficiente para alimentarse ellos mismos. La Hermandad Defias controla gran parte de la región, concentrándose especialmente en la zona sur de Arroyo de la Luna. En su día Pàramos de Poniente fue un importante centro agrícola, pero en la actualidad gran parte de él se encuentra totalmente abandonado. La Hermandad Defias, humanos renegados de Stormwind, poseen el control de gran parte de la zona. Algunos bandoleros y asaltantes gnolls explotan las zonas no ocupadas por los Defias, por lo que los recursos que envía Stormwind para proteger a la poca población que todavía reside en la zona, suelen quedarse cortos. Westfall suele tener unas temperaturas suaves al igual que Elwynn Forest, pero en ocasiones es azotado por los fuertes vientos que llegan tanto desde el mar como desde Duskwood. Las escasas granjas que quedan poco pueden hacer por cortar estos vendavales, por lo que la zona, un día verde y hermosa, se está convirtiendo en una región seca y estéril. La hierba es amarillenta y los campos están infestados con voraces aves carroñeras y máquinas cosechadoras que han ido dejando los renegados. Se rumorea que estos bandidos poseen una gran mina con una entrada en algún lugar de la pequeña ciudad de Moonbrook, y que tienen conexiones con los kobolds que ocupan las Minas Jangolode en Pàramos de Poniente y las diversas minas de Bosque de Elwynn. La milicia del pueblo ha erigido un último bastión del poder militar en la región en la Colina del Centinela, desde donde emitir órdenes a cualquier persona dispuesta a ayudar a la causa. Aunque la mayoría de las granjas de la zona han pasado a ser controladas por los Defias, todavía hay un número de agricultores que con valentía (y desesperadamente) se aferran a sus explotaciones a pesar de las pocas probabilidades que tienen de resistir.
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