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| - Atrapado es una mision de Driv3r que consta de 2 partes escapar del centro comercial con vida y deshacerse del coche que uses. En esta mision estaras acompañado de toda South Beach.
- ¿Sabes qué es lo más gracioso cuando crees tener la casa de tus sueños? Estoy segurísimo que llegaste a concluir, al menos que se te haya pasado por la cabeza, que al comprar finalmente tu finca pensaste en que sería sólo tuya y de nadie más. Además, estoy más que seguro que creas que esa morada es tuya porque tú la elegiste… o viceversa. ¿Sabes qué es lo más gracioso cuando crees tener la casa de tus sueños? Estoy segurísimo que llegaste a concluir, al menos que se te haya pasado por la cabeza, que al comprar finalmente tu finca pensaste en que sería sólo tuya y de nadie más. Además, estoy más que seguro que creas que esa morada es tuya porque tú la elegiste… o viceversa. Me hubiera gustado sentirme como tú… y estar en la situación en la que tú te encuentras ahora. De verdad. En serio, de verdad. Mira, sé que estás leyendo esto porque estás en mi casa… bueno, en su casa. Voy a ser breve, y más te vale que vayas con esos ineptos de bienes raíces que te vendieron esta casa porque lo único que les interesa es la plata, ¿tengo razón o no? ¿Crees que te la vendieron a muy bajo precio sólo porque les caíste bien, que hayan visto en ti al “afortunado” señor de la mansión? No, nada de eso amigo mío… Ellos ni siquiera tienen el suficiente valor para admitir lo que está pasando realmente tras los muros, o por debajo de las cortinas negras que sepultan tu cama durante la noche. Esos ruidos que escuchas mientras te tapas con la almohada pensando que son cualquier otra cosa, creyendo ciegamente que son esos malditos perros que ladran por fuera de tu cuarto, no son cualquier tipo de ruido normal. A mí también me pasó y voy a decirte qué es lo que está pasando de verdad. De nada te servirá decirte mi nombre. Los bienes raíces destruyeron los registros de los anteriores dueños, ya sabes por qué. A nadie le conviene vender un producto corrupto o que esté en mal estado, ¿no lo crees? Hace tres meses, me mudé a esta ciudad. Buscaba una casa que estuviera al menos cerca de la escuela primaria, esa que está a unas cuantas manzanas al este, sabes a cuál me refiero. Me sentí afortunado al encontrar esta residencia por lo que decidí comprarla. Nunca pensé que fuera a convertirme en la persona más desafortunada debido a los posteriores días. Entiendo que tú hayas aprovechado la oferta de obtener esta morada, pero dime… ¿crees que vale la pena? ¡¿DE VERDAD CREES QUE VALE LA PENA ESCUCHAR ESAS MALDITAS VOCES?! Por favor… no me digas que no sabes a cuáles me refiero. Escucha, el primer día que comencé a vivir en esta locación me sentí un poco extrañado. ¿Quién no lo estaría al sentir repentinas brisas frías correrle por el cuello? Había creído que pudieran ser esas fugas o escapes de aire que provienen de los tubos de aire del aparato de refrigeración. Habrás notado que ese sistema de tubería tiende a estar cerca de las esquinas de los muros, esos mismos que parecen casi imperceptibles. O bien, verás que tampoco hay problemas con respecto a las ventanas. Las cortinas no se mueven a la falta de viento eventualmente. Y es cuando, durante la noche, te darás cuenta que las sábanas no son suficientes para amortiguar esos repentinos cambios gélidos en la alcoba. Curiosamente, sentirás un leve frescor en el lugar expuesto de la cara, ese pequeño lugar donde el almohadón no alcanza a cubrir. Ese día pensé que sólo era sudor y nada más, sin embargo, permíteme una pregunta: ¿Quién es capaz de sudar dentro de una habitación que está a menos dos grados centígrados? A la mañana siguiente, te habrás limpiado esa sudoración, encontrando que resulta ser un poco pegajosa, misma que desprende un hedor un tanto nauseabundo. Es entretenido el hecho de estar figurándose teorías sobre qué pudiera ser esa extraña sustancia. Sé de donde viene ese líquido, me costó mucho averiguarlo. Ojalá nunca lo hubiera investigado cómo se origina. Me cuesta mucho olvidarlo. En el segundo día, sé que habrás cambiado la coloración de las habitaciones. Querrás que haya “luz” en todas las habitaciones, pensando que el color actual de las mismas estén creando esas sombras que las hacen tan oscuras. No recuerdo si habría sido la sexta o la octava vez que cambié la pintura de esos cuartos. A pesar de lo que hice y a pesar de mis intentos, nunca hubo luz en ningún pasillo… ni en ningún cuarto. En mi ingenuidad, había creído que eran esos árboles que adornaban la fachada. Sé lo que estás pensando. No son las sombras de ningún árbol o de las cortinas. Esas sombras siempre han estado y estarán allí siempre. Puedo decir que estás leyendo este mensaje después de unas cuantas semanas de que comenzaste a creer en lo improbable, en lo inverosímil, en lo tenebroso. ¿Cómo lo sé? Porque ahora estás en tu habitación, la única morada que puede salvaguardarte por el momento. Sabes que las puertas de las demás habitaciones ya no ceden, ni siquiera puedes forzar los pomos. Las ventanas ya no se pueden abrir, supuestamente porque el mecanismo se atascó. El umbral principal y el del patio trasero no pueden ser forzados, ya que están también atascados. Escucha… dejé esta carta como testimonio de mi existencia ya que ellos no me dejaron salir. Supe la historia real del recinto y créeme que es tan escalofriante como todas esas pesadillas, como todas esas malditas voces que has estado escuchando durante la noche, esos cacófonos susurros que hacen que te levantes con el corazón palpitando escabrosamente. Fallé en mi intento por huir y pude verlos… ¡pude verlos! ¡Dios mío! ¡Pude verlos! ¡Sombras! ¡Malditas sombras! Ellos… ellos me… ellos me dieron tiempo para escribir esto porque les pareció divertido, casi como un depravado juego. ¿Cómo no entenderlos cuando son oriundos de la más negra blasfemia que jamás hayas imaginado? Es tarde para mí pero si encontraste esta carta, significa que ellos te han permitido una última oportunidad de salir de aquí haciendo que estés en su juego. Tienes hasta antes del ocaso para encontrar el martillo y el cincel que dejé cerca de esta misiva. Escucha con atención, debes destruir el marco de la ventana y escapar. Hazlo, antes de que ellos te atrapen tal y como lo hicieron conmigo. Ya sabrás que esta casa no es en realidad un hogar, sino una prisión… una prisión donde a ellos se les privó el descanso salvo un eterno tormento aquí solos, atrapados. Te he dicho ya de dónde han venido ¿o acaso se te olvidó todo lo que te he estado diciendo? ¿O es que no sabías que, durante todo este tiempo, he sido yo quien te ha estado susurrando a mitad de la noche? Categoría:Fantasmas Categoría:CO
- Este es el tercer episodio de Destruccion Alienigena. Su nombre original es Traped.
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