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| - Bania era madre de familia humilde que vivían en una casa colonial junto a un pequeño lago y un hermoso bosque detrás. Se acababan de mudar hace ya una semana pero se sentían muy agustos junto a su esposo y su hija Ivette de 11 años. Un día como cualquiera Bania lavaba la losa mientras observaba a través de la ventana jugar a su hija en el patio trasero con sus muñecas, se da cuenta que el agua con que lavaba estaba saliendo sucia con barro, pequeñas piedras y hojas. Llama a su esposo para que fuera a revisar, la cañeria se quedo estancada. Al otro día su esposo salio al pueblo y solo se quedaron la madre y la hija en casa. Bania bajo las escaleras hasta el sótano para buscar cosas que aun no desempacaba mientras su hija Ivette en el patio jugaba a pescar en el lago. Bania en el sótano abre una caja que solo contenía diarios viejos en el que se mencionaba su casa en primera plana, muy entusiasmada por leerlo, se sentó en una vieja silla y comenzó a leer. "Madre e hijo son asesinados por su esposo este jueves pasado". Siguió leyendo y descubrío que la madre fue asesinada en la casa mientras que el cadáver del hijo de 8 años no fue encontrado. La policía encontró al asesino quien declaro pero luego se suicido. Bania horrorizada por lo que estaba leyendo subió rápidamente las escaleras y noto que en el piso había agua que venia de la llave que estaba estancada, se dirigió a la cocina y entre barro vio un pequeño dedo humano. Impactada fue a buscar a su hija la cual ya no se encontraba, desesperada llamo a su esposo,a la policia y siguió buscando a su hija, desde la ventana del segundo piso vio que su hija estaba jugando a las muñecas. Bajó corriendo pero noto que ivette estaba mojada y sucia, ella la miro y le pregunta. - ¿Qué ocurre mami? Te has demorado mucho. La madre se desmayó al ver que el rostro de su hija parecía de otra persona, lo más parecido al de un cadáver.
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