Es uno grave por prudencia y por madurez de reflexion; serio por carácter y por temperamento. La ligereza es opuesta á la gravedad; el regocijarse es opuesto á lo serio. La costumbre de tratar negocios nos da gravedad. Las reflexiones de una moral severa nos hacen serios.
Es uno grave por prudencia y por madurez de reflexion; serio por carácter y por temperamento. La ligereza es opuesta á la gravedad; el regocijarse es opuesto á lo serio. La costumbre de tratar negocios nos da gravedad. Las reflexiones de una moral severa nos hacen serios.