La Ley Anti-Lavado de Dinero le otorgaba poder a la Policía Federal para allanar casas de sospechosos de corrupción o de blanqueamiento de fondos sin orden judicial, perimitía que los sospechosos de dichos casos fueran detenidos de manera indefinida sin procesamiento por parte de la Justicia y establecía la obligatoriedad de intervenir los telefonos de personas juzgadas por dichos delitos de porvida
La Ley Anti-Lavado de Dinero le otorgaba poder a la Policía Federal para allanar casas de sospechosos de corrupción o de blanqueamiento de fondos sin orden judicial, perimitía que los sospechosos de dichos casos fueran detenidos de manera indefinida sin procesamiento por parte de la Justicia y establecía la obligatoriedad de intervenir los telefonos de personas juzgadas por dichos delitos de porvida Esta fue la única elección nacional durante la era del predominio radical que perdió el gobierno (y por un gran margen). La UCR planeaba hacer aprobar la Ley Anti-Lavado de Dinero en el Congreso. Pero el bloque de Diputados comunicó que si eso sucedía solicitaría a la Justicia que declarara la inconstitucionalidad de la ley. Consideraban que violaba los básicos derechos y libertades individuales establecidos en la Constitución de 1976. Ante dicha amenaza el Primer Ministro Eduardo Angeloz decidió presentar dicha ley para someterla a un plebiscito. La izquierda se sumó a los planteos del PR, y manifestó que la Ley Anti-Lavado de Dinero era la demostración de que el radicalism era una ideología facista.