Una casa no es un hogar hasta que alguien lo convierte en eso. Gao Ling estaba muy apegado a su casa de la ninez y se rehusaba a venderla a pesar de los mortales pagos hipotecarios. Mientras tanto, Yuan Hao ansia escapar de su familia, aunque ésta posea una compañía constructora de viviendas. Feng Shang Ning nunca ha tenido una casa y por lo mismo no sabía cómo diseñar una casa a la que las personas pudieran llamarla hogar. Gao Ling conoce a ambos en situaciones muy extrañas; a uno lo persigue para cobrarle, a otro para estafarlo. Aún así, uno de ellos será el padre de su hijo, su primer amor; y para el otro, ella se convertirá en su salvación.
Una casa no es un hogar hasta que alguien lo convierte en eso. Gao Ling estaba muy apegado a su casa de la ninez y se rehusaba a venderla a pesar de los mortales pagos hipotecarios. Mientras tanto, Yuan Hao ansia escapar de su familia, aunque ésta posea una compañía constructora de viviendas. Feng Shang Ning nunca ha tenido una casa y por lo mismo no sabía cómo diseñar una casa a la que las personas pudieran llamarla hogar. Gao Ling conoce a ambos en situaciones muy extrañas; a uno lo persigue para cobrarle, a otro para estafarlo. Aún así, uno de ellos será el padre de su hijo, su primer amor; y para el otro, ella se convertirá en su salvación.