Esta falacia se llama así porque apela al pathos (la emoción) y no al logos (la razón). Comprende todos los medios de persuasión o argumentativos que pretenden sostener un punto de vista provocando las emociones del auditorio.
Esta falacia se llama así porque apela al pathos (la emoción) y no al logos (la razón). Comprende todos los medios de persuasión o argumentativos que pretenden sostener un punto de vista provocando las emociones del auditorio.