thumb|400px El cuadrúopedo Rhoetosaurus tenía el cuello relativamente largo y la cabeza ancha. Gracias a las apófisis espinosas que tenía en las vértebras del cuello y la espalda, que estaban reforzadas con placas y barras óseas, el Rhoetosaurus podía poner el cuello casi vertical para alcanzar las hojas de los árboles más altos. Arrancaba las hojas con sus dientes en forma de cuchara. Como tenía los orificios nasales muy elevados, se cree que también comía plantas acuáticas. Categoría:Reptiles Categoría:Dinosaurios Categoría:Saurisquios Categoría:Saurópodos Categoría:Cetiosaurios Categoría:Fauna del Jurásico
thumb|400px El cuadrúopedo Rhoetosaurus tenía el cuello relativamente largo y la cabeza ancha. Gracias a las apófisis espinosas que tenía en las vértebras del cuello y la espalda, que estaban reforzadas con placas y barras óseas, el Rhoetosaurus podía poner el cuello casi vertical para alcanzar las hojas de los árboles más altos. Arrancaba las hojas con sus dientes en forma de cuchara. Como tenía los orificios nasales muy elevados, se cree que también comía plantas acuáticas. Categoría:Reptiles Categoría:Dinosaurios Categoría:Saurisquios Categoría:Saurópodos Categoría:Cetiosaurios Categoría:Fauna del Jurásico