El término afrodisíaco deriva de Afrodita, divinidad femenina griega relacionada con el amor, la fecundidad y la energía primaveral. Se le denomina afrodisíaco a cualquier sustancia que realmente o por fantasía popular estimule o aumente el deseo sexual
El término afrodisíaco deriva de Afrodita, divinidad femenina griega relacionada con el amor, la fecundidad y la energía primaveral. Se le denomina afrodisíaco a cualquier sustancia que realmente o por fantasía popular estimule o aumente el deseo sexual