| rdfs:comment
| - El término Persia ha sido utilizado durante siglos, sobre todo en Occidente, para designar una región del sur de Irán antes conocido como Persis o Parsa, el nombre de los pueblos nómadas indoeuropeos que emigraron a la región alrededor de 1000 aC, con el tiempo suplantando a los asirios y los caldeos. La primera mención de los parsa aparece en los anales de la Shalmanesar III, un rey asirio, en el año 844 antes de Cristo. Ciro II (559-529 aC), también conocido como Ciro el Grande, era el heredero de una larga línea de jefes de gobernar en la Mesopotamia y fue el fundador del imperio persa, fue llamado el padre de su pueblo por los antiguos persas. En el año 550 aC, Ciro, el Príncipe de Persia, se rebelaron contra los Astiages rey medo y soldadas a los persas y los medos juntos en una fuerz
|
| abstract
| - El término Persia ha sido utilizado durante siglos, sobre todo en Occidente, para designar una región del sur de Irán antes conocido como Persis o Parsa, el nombre de los pueblos nómadas indoeuropeos que emigraron a la región alrededor de 1000 aC, con el tiempo suplantando a los asirios y los caldeos. La primera mención de los parsa aparece en los anales de la Shalmanesar III, un rey asirio, en el año 844 antes de Cristo. Ciro II (559-529 aC), también conocido como Ciro el Grande, era el heredero de una larga línea de jefes de gobernar en la Mesopotamia y fue el fundador del imperio persa, fue llamado el padre de su pueblo por los antiguos persas. En el año 550 aC, Ciro, el Príncipe de Persia, se rebelaron contra los Astiages rey medo y soldadas a los persas y los medos juntos en una fuerza poderosa. Ciro consolidó su dominio en la meseta iraní y luego se extendió hacia el oeste, a través de Asia Menor. En octubre de 539 aC, Babilonia, la ciudad más grande del mundo antiguo, cayó ante sus ejércitos persas. Cyrus también supervisó la construcción de una serie de grandes carreteras para unir los territorios que había conquistado. Si bien Ciro fue un gran conquistador militar, fue también un gobernante justo, que permitió a la Judios a regresar de Babilonia a su patria en Palestina. Su dinastía, conocida como los aqueménidas, gobernó Persia durante dos siglos. Después de la muerte del heredero de Ciro, Darío I (522-486 aC), un destacado general y uno de los príncipes de la familia aqueménida, se proclamó rey tras la supresión de una serie de revueltas provinciales y amenazas de otros pretendientes al trono. Darío estaba en el molde de Ciro el Grande - una poderosa personalidad y un líder enérgico. Para consolidar su ascenso, Darío I fundó su nueva capital de Parsa, conocido por los griegos como Persépolis ("ciudad persa") y se expandió a las filas de su guardia personal, los Inmortales. La fuerza de élite tomó su nombre del hecho de que no importa cuántos hombres se perdieron, el emperador persa siempre paga el costo de restaurar los inmortales de nuevo a su fuerza original. Aunque Darío consolidada y se añade a las conquistas de sus predecesores, era como un administrador que hizo su mayor contribución a la historia persa. Durante su reinado, las reformas políticas y legales revitalizaron las provincias y ambiciosos proyectos se llevaron a cabo para promover el comercio imperial; acuñación de monedas, pesos y medidas se estandarizaron, y la tierra nueva y rutas marítimas explorado y establecido. Estas actividades, sin embargo, no impidió que Darío de seguir una política expansionista activo. Las campañas en este refrendaron las conquistas realizadas por Ciro el Grande y añadieron grandes del norte del subcontinente indio a la lista de provincias controladas por los persas. La expansión hacia el oeste comenzó alrededor del 516 aC, cuando Darío marchó en contra de las colonias griegas de la costa de Asia Menor. Jerjes (486-465 aC), hijo y sucesor de Darío I, estaba decidido a continuar la conquista persa del oeste, y es mejor conocido por su invasión masiva de Grecia desde el otro lado del Helesponto en el 480 aC, una campaña marcada por las batallas de Termópilas, Salamina y Platea. Aunque tuvo éxito en la pacificación de Egipto y la represión de una revuelta de Babilonia, su derrota por los griegos aliados de la ciudad-estado significó el comienzo de la declinación del Imperio Persa. En los últimos años de Jerjes, despilfarró el enorme tesoro que había reunido a través del comercio y los impuestos con el lanzamiento de vastos programas de obras, la mayoría nunca terminaron. La muerte de Jerjes era el punto de inflexión definitivo en la influencia persa. Destellos ocasionales de vigor y la capacidad de algunos de los sucesores de Jerjes fueron demasiado infrecuentes para evitar un eventual colapso. El acto final se jugó durante el reinado de Darío III (336-330 aC), que fue derrotado en la batalla de Gránico (334 aC) por Alejandro Magno. Persépolis cayó al conquistador macedonio joven en abril de 330 aC, y Darío, el aqueménida pasado, fue asesinado en el verano del mismo año, mientras huía de las fuerzas griegas. En la lucha por el poder tras la muerte de Alejandro, Seleuco I reunió bajo su control las provincias persas del imperio de Alejandro. Pero esta unidad no duró mucho, ya que las posesiones indias se rebelaron y el reino seléucida se dividió en las naciones rivales de Partia y Bactria. Las partes del reino seléucida se prolongó durante dos siglos, pero finalmente fue barrido a un lado por los partos, que fundó un imperio que se extendía casi hasta Persia bajo los aqueménidas. Los romanos y los partos luchado uno contra el otro durante siglos por el control de Mesopotamia, con la celebración de los partos por lo general en la mayor parte de la Media Luna Fértil. Sin embargo, en 224 dC los partos eran ellos mismos derrocado por una nueva dinastía sasánida que revivió muchas de las costumbres de los aqueménidas, tales como la religión de Zoroastro. Los sasánidas se enfrentaron en una serie de guerras debilitantes con el Imperio Bizantino en los siglos 6 y 7, que fatalmente debilitado el Imperio Persa, cuando los árabes irrumpió en la escena. En una serie de batallas decisivas entre 633 y 642, los árabes conquistaron y destruyeron el Imperio Persa, y desde este momento, Persia (actual Irán) ha pertenecido a gran parte del mundo árabe. Las costumbres y la religión de la antigua Persia fueron destruidas y la población absorbida por la cultura circundante islámica, sólo unos pocos restos sobreviven hoy en día. Categoría:Civilizaciones de Civilization IV
|
![[RDF Data]](/fct/images/sw-rdf-blue.png)