El periódo 1123-1132 supone un despertar del pacifismo abbatico. Es evidente que dos elementos esenciales vinieron a contribuir a dicho pacifismo, de una parte, la conciencia de las propias eminencias para defenderse y de otro, un cierto hartazgo de la Cristiandad ante el panoráma dibujado en la anterior decada. Así pues, para 1123 - 1132, el mayor desarrollo de las comunidades abbaticas, con abadias poderosas capaces de mantener un alto número de guardias y los muros defensivos a nivele 3 y 4 redujeron ostensiblemente el éxito sicarial.
El periódo 1123-1132 supone un despertar del pacifismo abbatico. Es evidente que dos elementos esenciales vinieron a contribuir a dicho pacifismo, de una parte, la conciencia de las propias eminencias para defenderse y de otro, un cierto hartazgo de la Cristiandad ante el panoráma dibujado en la anterior decada. Así pues, para 1123 - 1132, el mayor desarrollo de las comunidades abbaticas, con abadias poderosas capaces de mantener un alto número de guardias y los muros defensivos a nivele 3 y 4 redujeron ostensiblemente el éxito sicarial. No es menos desdeñable que la repulsa generalizada ante estos actos conllevço que menos abadias se arriesgasen a caer en el ostracismo por el envio sicarial. Por último, la desactivación de organizaciones como la O.S.A o Los Dulcinistas implicaron un menor número de muertes. Aún así, durante el año 1127 se produjeron 10 asesinatos.