El reino de Kent es uno de los siete reinos no celtas de Britania. El reino se estableció en el 455 cuando se asentaron miembros del pueblo junto tras la caída del Imperio Romano. Tras su creación se convertiría en uno de los siete reinos más influyentes y determinante en la historia de la isla de Bretaña.
El reino de Kent es uno de los siete reinos no celtas de Britania. El reino se estableció en el 455 cuando se asentaron miembros del pueblo junto tras la caída del Imperio Romano. Tras su creación se convertiría en uno de los siete reinos más influyentes y determinante en la historia de la isla de Bretaña.