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| - Según el folklore asturiano, la Güestia es un grupo de ánimas que visita a los moribundos antes de morir. Por lo general, este grupo está formado por conocidos del moribundo que fallecieron antes que él. Con sudarios blancos y un ataúd se llevan el alma del futuro fallecido, tras haberlo visitado tres veces.right|362px Al contrario que otras “formaciones de este tipo”, el objetivo de estos no es asustar a los vivos, sino servir de portadores del alama del difunto; sin embargo, si un despistado se topa con ellos, “le dan un estacazo", es decir, una muerte instantánea.
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| - Según el folklore asturiano, la Güestia es un grupo de ánimas que visita a los moribundos antes de morir. Por lo general, este grupo está formado por conocidos del moribundo que fallecieron antes que él. Con sudarios blancos y un ataúd se llevan el alma del futuro fallecido, tras haberlo visitado tres veces.right|362px Al contrario que otras “formaciones de este tipo”, el objetivo de estos no es asustar a los vivos, sino servir de portadores del alama del difunto; sin embargo, si un despistado se topa con ellos, “le dan un estacazo", es decir, una muerte instantánea. Para alumbrarse como si fuesen “cirios”, usan huesos encendidos. Se trata de una procesión nocturna que deambula por los caminos y a cuyo paso pueden oírse claramente lamentos, toques de campanillas y cantos fúnebres; es la leyenda más macabra con la que puede uno toparse en las tierras Asturianas. Así cantaron estas almas penitentes: "Cuando nos yéramos vivos andábamos a estos figos y ahora que somos muertos andamos por estos güertos ¡Andar, andar hasta’l tueru la figar!" La diferencia con la Santa Compaña es que esta última se comprende como una procesión que adopta la forma de dos hileras de almas “en pena” con un cirio encendido. A la cabeza va una persona viva que porta una cruz.
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