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| - thumb|Infantes de Marina Chilenos durante la Guerra Sudamericana. Durante la Guerra Sudamericana, Chile contó con una importante cantidad de armamentos (Al contrario de NLT, la Enmienda Kennedy no se aplicó en Chile debido a que no hubo dictadura). Aunque al principio se llegó al extremo de tener que armar reservistas temporalmente con Rifles Mauser M1895 y Subametralladoras Z45 STAR, la industria chilena y las importaciones llegaron a un nivel sostenible para el curso de la guerra para abril de 1979. Durante la década de los 60', se había bajado el gasto militar debido a las buenas relaciones de Chile con sus vecinos durante esa época (Exceptuando el Incidente de Laguna del Desierto), pero dicha situación cambio en la década siguiente. La Fuerza Aérea renovó material con la incorporación de Aviones F-5 y Cessna A-36 en 1975 y Aviones SAAB 37 Viggen en 1976. En tanto, la Armada adquirió del Reino Unido, las fragatas Almirante Condell y Almirante Lynch, y los destructores Baquedano y Balmaceda (en 1973), mientras que a EEUU fueron comprados dos destructores, el Ministro Portales y Ministro Zenteno (en 1974), además de dos submarinos. Por su lado, el Ejercito poseía armamento comprado en décadas posteriores además del Material donado por Estados Unidos en el marco de la "Alianza Para el Progreso" entre los que se encuentran tanques Sherman y M24 Chaffee, y varios Fusiles M1 Garand y más material sobrante de la Segunda Guerra Mundial y la Compra de Tanques M48A5 Patton a EE.UU. en 1975 (Aquí no se produce el "Circo" de Fusiles como en NLT debido a que se homologo rápidamente al SIG-510 para el Ejercito, mientras que los FN FAL fueron transferidos a la FACH y los HK G3 fueron a parar a las Dotaciones de Infantería de Marina). La Industria Local obtuvo un gran impulso y llego a desarrollar tecnología que después seria común en el mundo militar como la Bomba de Racimo "PJ1" fabricada por Industrias Cardoen junto a los Carros de Combate MOWAG Piraña en sus versiones 4x4 y 2x2, las Fabricas Baselli y Hnos. fabricaron indumentaria para las FF.AA., mientras que FAMAE (Fabricas y Maestranzas del Ejercito) produjo la versión chilena bajo Licencia del SIG-510, el SIGA, que demostró ser efectiva en combate además de la Subametralladora FAMAE PAF que era una copia de la Sterling Británica además de la Ametralladora FN MAG, ambas producidas bajo licencia.
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