Los guantes que posee son muy intimidantes, ya que son tan filosos, que serían capaz de rebanarte en pedacitos muy rápidamente. Físicamente son muy parecidos a un guante de béisbol, pero sin ser tan alcochonados en la palma de la mano. El propio Freddy le puso cuatro afiladas cuchillas de forma tal que puedan manejarse como los dedos (excepto en el lugar del pulgar), haciéndolos así extremadamente peligrosos.
Los guantes que posee son muy intimidantes, ya que son tan filosos, que serían capaz de rebanarte en pedacitos muy rápidamente. Físicamente son muy parecidos a un guante de béisbol, pero sin ser tan alcochonados en la palma de la mano. El propio Freddy le puso cuatro afiladas cuchillas de forma tal que puedan manejarse como los dedos (excepto en el lugar del pulgar), haciéndolos así extremadamente peligrosos.