El Gobierno Mundial ha dividido el espacio habitable del planeta en diversas regiones administrativas que gozan de mayor o menor autonomía según su caso, pero que invariablemente deben obedecer las leyes fundamentales de la Revolución.
El Gobierno Mundial ha dividido el espacio habitable del planeta en diversas regiones administrativas que gozan de mayor o menor autonomía según su caso, pero que invariablemente deben obedecer las leyes fundamentales de la Revolución.