Los Angeles, verano, calor y el primer Rockmagedon, evento oriundo de la ciudad de Los Angeles, única instancia (hasta ese entonces) en donde los músicos locales podían meter ruido a diestras y siniestras. Y entre metaleros y punks esa tarde se asomaron, nunca tímidamente, cuatro jóvenes de vestimenta ‘inocente’ y cortes de pelo colegiales. Ya con algunos temas grabados, y una clara necesidad de editar un disco para lograr una mayor difusión viendo la aceptación en los escenarios capitalinos, comenzó a bosquejarse una nueva etapa.