La luna roja refleja su opaca luz en el tétrico paisaje creado por Obito, un gran charco de sangre derramada por sus enemigos, el Uchiha se siente impotente y derrama lagrimas por su amor perdido mientras piensa en aquellas palabras de Madara Uchiha luego de experimentar la desesperación y estar en el infierno decide crear un mundo en donde Rin vuelva a vivir. Obito regresa con Madara y le explica sus razones para crear aquel mundo de ensueño con solo ganadores sin sufrimiento ni dolor, Madara satisfecho al escucharlo decir esto prosigue a mostrárselo, le explica que al llevar a todas las personas del mundo a un genjutsu ideal y así traer la paz pero para eso se requeriría reflejar sus ojos en la luna, Madara le explica su plan más detalladamente y como despertó el Rinnegan, como usara a l